"Horchatinol" y “CHAC-MOOL” Es la marca del concentrado de Horchata que surgió en Mérida, Yucatán, en el año de 1939 motivado por la demanda del cliente yucateco.

El inicio de nuestra historia.

Corría el año 1930 cuando Don Manuel Mézquita Aragón y Doña Lucia de Mézquita Zapata perfeccionaron su fórmula para la preparación de su agua de Horchata en la pequeña ciudad de Mérida Yucatán.

El agua la usaban para complementar las comidas y las cenas de los antojitos yucatecos de su puesto en el mercado municipal y el traslado del agua era difícil por carecer las calles de asfaltado de manera que Miguel Mezquita Zapata (hijo) decide reducir el agua e incrementar el azúcar con un preparado especial de leche y especias para hacer un Jarabe de Horchata con el objeto de disminuir la pérdida del líquido logrando además un mayor tiempo de vida, por que debido al calor el agua preparada se fermentaba muy fácilmente.

Los comensales empezaron a pedir este producto espeso y cremoso para llevar a su casa en las botellas que ellos mismos llevaban, idea que rápidamente adoptaron los señores Mézquita tapando las botellas con un corcho.

Había nacido "Horchatinol"

En el año 1945 se obtiene la patente 45106 confirmando ser el primer concentrado de horchata en el Mercado. Más tarde Manuel Mezquita Zapata se aventura en la CDMX para probar fortuna con la receta yucateca comenzando en la colonia Roma donde se encontraba establecida una colonia de yucatecos quienes conocían y querían el concentrado, así es como como empieza a colocarlo en los mercados populares de la CDMX comenzando la tradicional Horchata Mexicana.

Los concentrados "Chaac-mool" nacen de la necesidad de ampliar y darle a nuestros clientes una variedad que puedan llevar a su mesa con la misma facilidad del concentrado de "Horchatinol".

Los primeros concentrados que se elaboran son los sabores de Jamaica y Tamarindo, contando actualmente con doce sabores diferentes para complacer a todos los gustos y necesidades.

La calidad y sabor de nuestros concentrados y jarabes de debe a la cuidadosa selección de sus ingredientes, así como también su exclusivo proceso de elaboración, logrando de esta forma un sabor y una textura característica de una bebida 100 % natural. Obteniendo concentrados ligeros, saludables y exquisitos.